2 septiembre 2015

De la salida de la crisis económica, y la recuperación de la garantía hipotecaria y el fortalecimiento del estado del binestar

No pretendo tener una varita mágica y pretender que doy nada más que una idea que otros podrían terminar de completar, si se estima que es de utilidad.
(Tan sólo soy un punto de opinión)

Con un impuesto en los juegos de azar, puesto que a quien le toca un premio de 50.000 euros es tanto que el impuesto no le merma su ilusión (Es un ejemplo).

Ese dinero, puede servir, a la creación de un banco en el mercado bursátil alternativo, que estaría protegido de opas hostiles, y con una fuerte regulación interna, a prueba de sinvergüenzas, especuladores.

De ahí fluiría la solvencia de este banco, que tiene valga la redundancia, su solvencia garantizada, para financiar la recuperación de las PyMes, etc.

Así mismo podría garantizar la recuperación de la garantía hipotecaria, deteniendo la sangría de los deshaucios, ofreciendo, con solvencia garantizada, y en necesidad, a fondo perdido, la garantía hipotecaria. Motivo fundamental subsidiario de la crisis y la burbuja que nos han dañado tanto.

En lo demás, una fuerte regulación del mercado alternativo bursátil, para evitar, su descapitalización, por empresas meramente especulativas. (Recordemos el caso de una cierta empresa que casi da al traste con el mercado bursátil alternativo)

Espero que esta idea, ponga sobre los pasos a las mejores mentes, como una pieza más en la solución del problema.

 

—Pero en un impuesto que se cobrara antes de dar el premio, de manera que no se repercuta en el premio final—

2 septiembre 2015

Sistema antibutrones hechos con oxígeno y acetileno

Un detector de niveles de óxigeno ó acetileno en el interior del cajero, y una carga de nitrógeno líquido (comprimido) se expande en el momento en que se detectan éstos gases, teniendo el cajero 4 puntos de escape rápido de gas. Al expandirse el nitrógeno desaloja cualquier gas del interior del cajero, lo que impide que pueda ser ‘reventado’ por explosión. Una onda expansiva de dentro a fuera. Al mismo tiempo caen persianas metálicas sobre la sucursal, dejando sellado el recinto.

Si hay un cliente junto con los butroneros, todos estarían ante el mismo riesgo, por lo que los propios butroneros por su propia seguridad se verían forzados a no llevar adelante su operación. Al mismo tiempo que salta el nitrógeno, un aviso es enviado electrónicamente a una empresa de seguridad, o una comisaría, para investigación del suceso. Opino que como se custodia un bien objetivo, el costo puede entrar dentro de los límites de asegurar ese bien.

(Hay que señalar que el ‘golpe’ de nitrógeno haría perder el conocimiento a los butroneros que estuvieran dentro del banco, en el habitáculo para el cajero, por lo que probablemente sería necesario medir con un sensor externo la abundancia relativa de nitrógeno y compensar con oxígeno, por ejemplo, con una rejilla automática al exterior, que por compensación de la presión atmosférica, normaliza la cantidad de gases, es esta rejilla un sistema pasivo de compensación de gases)

Si se tratase de un sistema pasivo global. Podría hacerse mediante la apertura de X orificios equidistantes dentro del cajero, y un sistema de absorción de impacto de la onda explosión. De dentro a fuera. Pero con el volumen suficiente de mezcla de gases, no parece que ningún sistema razonable que esté dentro de coste, pueda absorver la onda expansiva lo suficiente, para garantizar que el cajero sigue siendo hermético y a prueba de ondas explosivas. Quizá cabría pensar en el mecanismo contrario de implosión (de fuera hacia dentro) para compensar una explosión, pero complicado saber la cantidad de fuerza explosiva (de dentro a fuera) que se va a poder utilizar. Aun a pesar de que los límites físicos del cajero estén bien establecidos. No obstante, si nos fijamos en que cualquier reacción depende de la cantidad de oxígeno disponible nos puede dar la medida de la violencia de la explosión, tenemos en contra, que al no ser hermético el cajero, o aunque lo fuera podría verse sometido a orificios, no podemos poner una carga implosiva exacta para contrarrestar la explosión a la que pudiera verse sometido el cajero. Y más aún, su contenido podría quedar destruido.

-Una consideración, sin saber la cifras concretas, si las aseguradoras cobraran (no recuerdo bien las cifras) un 14% por asegurar los cajeros, y el circulante por cajero fuese de un 70%. Estamos hablando de un volumen de dinero respetable.

Análisis del problema a 19 Feb 2013, tras conocer la noticia.